Hubo un momento, entre mi adolescencia y mi juventud, en que bastante influida por los cánones de belleza reinantes, probaba dietas, que al cabo de un tiempo me llevaban otra vez a mi peso de antes de iniciar la dieta, o a 
superarlo, perdía kilos tan fácilmente como los ganaba. Mi metabolismo se estaba volviendo loco, acostumbraba a mi cuerpo a subsistir con 700 calorías diarias, mi cuerpo entonces entraba en situación de emergencia y después de la pérdida de peso inicial, se acostumbraba a vivir con esas 700 calorías diarias, y si entonces comía normal, mi cuerpo almacenaba kilos en forma de grasa; ¡¡¡comiendo normal engordaba!!!, lo que me llevaba a comer menos para mantenerme delgada, ¡vaya locura!.
Y,… ¡es que a mi me gusta disfrutar de la comida!, ¡me gusta comer!; y además algunas veces usaba la comida, como algunos malévolos anuncios instigan, para mitigar mis problemas, para obtener un placer, que no obtenía de otra manera. Y que irremediablemente me llevaba a sentirme peor una vez tomaba conciencia de lo que había hecho. En fin, una noria de d
esórdenes alimenticios, de altibajos emocionales, de búsqueda infructuosa…, por no hablar del gasto en dietas, mejunjes, tes especiales, cremas y demás. Mantuve esos patrones de conducta en mayor o menor grado hasta que como resultado de mis estudios de naturopatía y Programación Neuro-Lingüística mayormente, confeccioné este método y lo adapté a mi vida, ¿Qué conseguí? Conseguí un cuerpo más vital, con más energía disponible, un cuerpo saludable y equilibrado, aprendí a dirigir mi mente, a focalizarla en aquello que quiero conseguir. Mantengo un peso estable sin contar ni una caloría, y sin vivir esclava de la balanza. Me gusto y me acepto. Disfruto sintiéndome atractiva. Tengo mayor confianza en mi misma, mayor autoestima…
Y ahora, mi misión es dar a conocerlo,y facilitar en las personas el 
proceso de adelgazar, y mantener un peso equilibrado, liberándonos de la obsesión por la comida, las calorias, el cuerpo 10,… para dar un giro hacia un estilo de vida saludable, vital, un estilo de vida donde se aprende a manejar la ansiedad, donde recuperamos el control.
